Kiewit Luminarium
Omaha, Nebraska
El Kiewit Luminarium fusiona lo rural y lo urbano para crear un entorno de aprendizaje práctico de CTIM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) en el paseo fluvial de Omaha. El espacio, y el propio edificio, se conciben como un “contenedor”. La estructura es sencilla, flexible, adaptable (todo en el interior queda a la vista), lo que convierte al propio edificio en la mayor exposición CTIM. El luminarium tiene la flexibilidad de adaptarse y cambiar a múltiples configuraciones de exposición y posibles usos futuros. El núcleo arquitectónico y los espacios interiores se consideran un contenedor o “telón de fondo” del contenido del edificio.
El concepto de acabado interior: Un espacio en bruto sin terminar, en el que se hace más hincapié en la propia estructura primaria que en el “diseño” o los acabados del interior del edificio. El interior del edificio tiene capacidad para que los usuarios taladren cualquiera de sus paredes de madera contrachapada para facilitar la experiencia CTIM de los niños. Los acabados incluyen sistemas de trabajo a la vista, pantallas acústicas y tratamientos superficiales cuando así lo exigen las normas de desempeño acústico y materiales naturales siempre que sea posible, para así evitar la típica construcción de paredes con base pintada de tablaroca, yeso o goma.
Como parte de sus primeros trabajos de cimentación, Kiewit instaló 207 micropilotes EA de 10.75 pulgadas de diámetro por 62 pies de profundidad (en promedio). En cada micropilote se colocó un revestimiento permanente de 7 pulgadas de diámetro. Para mitigar el riesgo de corrosión del revestimiento interno, se colocó grout de cemento de 8000 PSI en el interior y alrededor del espacio anular del revestimiento permanente de 7 pulgadas.
Un espacio así fomenta el juego y la experimentación, sin miedo a deteriorar o deformar algo.